Te comparto dos juegos que son muy divertidos y además llenan de alegría estos días con nuestros pequeños. Con ellos desarrollará habilidades del oído y el olfato.
Teléfono de cartón
Antes de que nuestro bebé pueda comunicarse mediante palabras, va desarrollando su oído para el habla. Cada vez que hablamos con él satisfacemos su necesidad de palabras.
Lleva el tubo de cartón a su siguiente cambio de pañal y dile: "Te voy a decir un secreto". Pon el tubo junto a una de las orejitas de tu bebé y susurra algo corto y sencillo. "Te amo" siempre es un buen comienzo. Mueve el tubo a la otra oreja de tu bebé y dile otro "secreto". Simplemente descubrir que puede oír con cada oído de manera independiente lo mantendrá fascinado durante varios cambios de pañal.
Los recién nacidos son notables por sus sensibles naricitas. Las investigaciones han demostrado que los bebés pueden reconocer el olor de la leche del pecho de su madre en su primera semana de vida. Para probar el agudo sentido del olfato de tu bebé, organiza una sesión de aromas en tu hogar.
Qué necesitas: tarritos de canela, nuez moscada o vainilla; perfumes o almohadillas perfumadas; un plátano maduro; una rebanada de naranja o de limón.
Siéntate con tu bebé en tu regazo (usa una cobija o mantita para envolverlo si se mueve mucho) con varios tarritos de diversos artículos fragantes, como los mencionados arriba, en una mesa frente a ti. Pasa cada uno de ellos bajo su nariz y observa su carita para ver su expresión. Podría abrir mucho los ojos, parecer asombrado o hasta sonreír. En el caso de las frutas cítricas (un olor que por lo general no les gusta a los bebés), podría fruncir el ceño o voltear hacia el otro lado. Prueba esta actividad cada vez que pasen algunas semanas, al ir creciendo tu bebé, para ver cómo cambian sus reacciones.
Teléfono de cartón
Antes de que nuestro bebé pueda comunicarse mediante palabras, va desarrollando su oído para el habla. Cada vez que hablamos con él satisfacemos su necesidad de palabras.
Un momento perfecto para conversar es cuando está acostadito y le estás cambiando su pañal. Estando ahí no sólo tiene que verte y escucharte, sino que además tu cara está cerca de su nivel. Un juego de "teléfono" usando un tubo de cartón lo mantendrá intrigado y le proporcionará un punto estable en el cual concentrar su atención.
Recuerda usar un tono de voz suave y mantener la vista lo más fija posible en sus ojos para que al mismo tiempo identifique de donde proviene el sonido
Qué necesitas: un tubo de cartón de toallas de papel o de papel higiénico.
Lleva el tubo de cartón a su siguiente cambio de pañal y dile: "Te voy a decir un secreto". Pon el tubo junto a una de las orejitas de tu bebé y susurra algo corto y sencillo. "Te amo" siempre es un buen comienzo. Mueve el tubo a la otra oreja de tu bebé y dile otro "secreto". Simplemente descubrir que puede oír con cada oído de manera independiente lo mantendrá fascinado durante varios cambios de pañal.
Juego de aromas
Los recién nacidos son notables por sus sensibles naricitas. Las investigaciones han demostrado que los bebés pueden reconocer el olor de la leche del pecho de su madre en su primera semana de vida. Para probar el agudo sentido del olfato de tu bebé, organiza una sesión de aromas en tu hogar.
Qué necesitas: tarritos de canela, nuez moscada o vainilla; perfumes o almohadillas perfumadas; un plátano maduro; una rebanada de naranja o de limón.
Siéntate con tu bebé en tu regazo (usa una cobija o mantita para envolverlo si se mueve mucho) con varios tarritos de diversos artículos fragantes, como los mencionados arriba, en una mesa frente a ti. Pasa cada uno de ellos bajo su nariz y observa su carita para ver su expresión. Podría abrir mucho los ojos, parecer asombrado o hasta sonreír. En el caso de las frutas cítricas (un olor que por lo general no les gusta a los bebés), podría fruncir el ceño o voltear hacia el otro lado. Prueba esta actividad cada vez que pasen algunas semanas, al ir creciendo tu bebé, para ver cómo cambian sus reacciones.
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